Carpe diem es una locución latina, concebida por el poeta romano Horacio (65-8 a. C.) en su libro Odas (I, 11), cuya traducción literal es 'aprovecha el día' o 'cosecha el día', en el sentido de aprovechar el tiempo y no malgastarlo.[1] . El adagio latino podría equivaler a oraciones en español como «no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy» o «vive cada momento de tu vida como si fuese el último». https://es.wikipedia.org/wiki/Carpe_diem